Cuando
estás inmerso en una competición profesional o semi-profesional,
todos los condicionantes que pueden influir en que en un momento dado
puedas perder o ganar un partido, son objeto de estudio y sobre todo
aquellos que, a priori, no tendrían o no debieran tener una relación directa con la
propia competición y poco o nada con lo
que trabajas en la pista todos los días en los entrenamientos, o si,
pero que indican un dato que suele repetirse sin excepción. Bueno
no. Alguna hay pero es eso, una excepción.
La
Copa Adecco de Leb Plata está maldita.
Los equipos que participan en ella, después de alcanzarla al haber
obtenido los mejores resultados de toda la primera vuelta de la
competición, como no puede ser de otro modo, ya es lo que otorga
la clasificación, con mejor o peor suerte para los dos contendientes
que la disputan, sufren lo que debería ya denominarse la “depresión
post copa”, pues se ha convertido
en el común denominador en todas las ediciones. Tengo que decir
antes de continuar, que he tenido la suerte de poder ascender de
categoría, a Leb plata y a Leb Oro, en tres temporadas consecutivas,
pero que nunca he disputado una copa Adecco plata ni copa Príncipe. No hablo desde la experiencia, sinó desde la observación empírica de la frialdad de los resultados.
A saber.
Por
empezar por la más reciente, la que se jugo el pasado día 7 de
febrero en Castellón y que enfrentó al equipo anfitrión contra el
Guadalajara, acabó con victoria para los de Toni Ten por 88-73. Los
números que dieron el pasaporte para la cita a los dos equipos eran
espectaculares: 13 victorias por 1 derrota del equipo del Amics del
básquet Castelló y 10 victorias por 4 derrotas de los de Javi
Juárez.
En las 4
jornadas siguientes a la disputa del partido de copa (son las que se
llevan disputadas en el momento de escribir este post 13-3-2015) las
prestaciones de los equipos ha bajado bastantes enteros: 1 victoria y
3 derrotas para los de la costa levantina y 2 victorias y dos
derrotas para los del centro. Esos números han hecho además que los
primeros hayan perdido la condición de líder destacado en la
competición y los de Guadalajara hayan bajado hasta la cuarta
posición. No hay que buscar más lecturas, o al menos esa no es mi
intención, pero es un hecho no aislado. (A la publicación de este
post, e equipo de Castelló ha conseguido una nueva y solvente
victoria en casa. El equipo de Guadalajara ha caído en la prórroga 15-3-2015)
La
edición que se disputo en 2014 entre los equipos de Fuenlabrada y
Prat, no fue mejor para los participantes, al menos justo después
del encuentro copero, ya que cabe recordar que acabaron siendo los
dos equipos que ascendieron por méritos deportivos a la Leb Oro, con
la posterior renuncia de los madrileños al ascenso.
Con un
balance de 9 victorias y 3 derrotas se clasificaron los dos
contendientes, Fuenlabrada primero y Prat segundo respectivamente. El
partido copero cayó del lado de los de Carles Durán por 79-83. Ahora vienen las cinco jornadas posteriores a la disputa del
partido. Fuenlabrada gano 3 de esas cinco jornadas y Prat solo una de
las 4 que disputo (tuvo jornada de descanso, al ser un grupo impar).

No
fueron muy diferentes las anteriores. En la edición de 2012 se
enfrentaron River Andorra y Autenerche Maquinaria, acabando los del
principado ascendiendo a Oro, pero el equipo vitoriano como 6º
clasificado a pesar de alzarse con el titulo copero. En la de 2011
también la jugo el equipo de Andorra contra Clavijo, siendo el
partido de copa para los riojanos y también el ascenso, cayendo el
equipo Andorrano hasta la cuarta posición.
Esta
temporada, parece que se ha extrapolado a la competición mayor, la
Leb Oro, ya que de los dos contendientes que han participado en esa
Copa Príncipe, Quesos Cerrato Palencia y Ribera Sacra Breogán de
Lugo y del que resultó vencedor el equipo de Natxo Lezcano (desde
estas líneas un abrazo y mucha suerte de la buena) por 78-69, a uno
de ellos, el equipo gallego, no le ha afectado demasiado haberla
jugado, pero al equipo Palentino le está costando levantarse desde
la cita copera: 2 victorias por muy corto margen y 3 derrotas, dos de
ellas en casa. (En la jornada de la reedición del partido aunque en
tierras gallegas, se ha impuesto el Ribera Sacra al equipo Palentino)
Creo
que a cualquier entrenador, equipo, club o directiva que se precie,
desea que la entidad en la que trabaja sea el centro de atención en un evento tan particular como es la Copa Adecco o la Copa
Príncipe, sobre todo porque los méritos que dan derecho a la
disputa, derivan del trabajo bien hecho hasta ese momento y el
resultado del partido, aporta unos beneficios de cara a la
clasificación para play off nada desdeñables, pero es curioso que
sea un partido que trae consecuencias no siempre buenas a posteriori,
para el rendimiento de alguno de los equipos y en ocasiones para ambos.
¿la solución o el remedio? Seguramente no es necesario. Posiblemente seguirá pasando hasta que deje de hacerlo,
incluso cabe la posibilidad de que en realidad sea algo que solo
veo yo porque en realidad no existe, pero por si las moscas y ante la posibilidad de que se repita en futuras ediciones, igual hay algo que los entrenadores podamos hacer para prevenir ese "post Copa".
Algún día
tendré la oportunidad de experimentarlo y por si las moscas…yo lo
tendré en cuenta.
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