BÀSQUET

BÀSQUET

dimarts, 18 de febrer del 2020

LA COPA

La Copa del Rey de baloncesto es, para mi, el mejor evento deportivo en sistema concentración, que se puede encontrar ahora mismo en el panorama del baloncesto europeo, sin ningún género de dudas, incluso por encima de la Final 4 de la Euroliga. Por cantidad de partidos, tipo de juego, nivel de los jugadores, entrenadores y por ende sus equipos, es desde hace ya muchas temporadas, cita obligatoria para todos aquellos que aman este juego. Cita obligatoria al menos una vez, pero... aviso a navegantes: es muy difícil no repetir. Yo acabo de estar en mi décima en 15 años.

Ocho equipos con sus respectivas aficiones, compartiendo un mismo espacio, en perfecta armonía y un mismo objetivo con el baloncesto como vehículo. Pero lo más importante: termine como termine y gane el que gane, aquel que acude al evento se lleva para casa el lunes siguiente al de la final, 4 días de diversión a todas horas, buen comer, buen baloncesto y buena compañía en la calle, aunque la bufanda sea de otro color. Grandes y perdurables amistades se fraguan en el marco de la Copa del Rey, personas con las que solamente te reunirás una vez al año en diferentes sitios de la geografía, pero que confirmarán si cabe lo mucho que vale la pena, guardarse los 4 días del tercer fin de semana de febrero en la agenda.

Pero esta última en Málaga ha sido muy especial. Por tener la oportunidad de compartir algunos días con Natxo y volver a coincidir, por enésima vez otros tantos con Koldo (y que dure), por la participación de hasta 4 jugadores ACB mallorquines (Álex Abrines en Barcelona, Joan Sastre en Valencia, Rudy Fernández en Madrid y Tomeu Rigo en Bilbao, además del menorquin Sergi Llull, "Yul" para los amigos), por el gran clínic sobre juego sin balón en categorías de formación que nos ofreció Xavi Pascual, el gran nivel de la competición paralela a la mayor: La Mini copa Endesa, y sobre todo por su participación en ella de Jaume Amengual Vallori en las filas del Real Madrid, en calidad de invitado. ¿Que quien es Jaume? jugador del equipo infantil especial del club Colonya Pollença del pueblo con el mismo nombre en Mallorca, equipo del que me siento muy orgulloso de ser el entrenador. Un equipo de grandes amigos a los que les encanta este juego y que, con justicia, se han sentido participes de la gran experiencia que ha podido tener su compañero de equipo.

Sus padres, enormes personas, han sido seguramente los grandes sufridores de toda esta aventura, porque a pesar de que les haya servido para vivir su primera Mini Copa y Copa de Rey y haber podido ver a su hijo vestido con los colores de uno de los mejores clubes del mundo, han tenido que disfrutar de lo vivido por su hijo desde la distancia, como no puede ser de otro modo, en los momentos buenos, cuando apetecen unas risas y en los momentos malos, cuando ves que necesita un abrazo.

Para mi, no ha sido una copa más. Ha sido "La Copa". Jaume de alguna forma nos ha acercado al evento a todos los que le conocemos y hemos estado en Málaga durante estos días. Hemos tenido la oportunidad de vivir de una forma un poco mas cercana, la competición en La Ciudad deportiva de Carranque. No ha sido simplemente la competición de los peques. Aquellos que verdaderamente respetamos a Miquel y a Cati y tenemos cierta estima aunque en diferentes grados con Jaume, nos hemos sentido parte del evento. Será recordada por algunos durante mucho tiempo. Solo aquellos que equivocadamente tengan la tendencia de normalizar las cosas, olvidaran estos cuatro dias. 

Ahora no es importante qué incidencia tendrá todo esto mañana en la vida de Jaume Amengual Vallori. Debe seguir trabajando para ser mejor, sin duda que si, pero sobre todo lo que tiene que hacer es subirse a un árbol, caerse con la bici, jugar con los amigos y seguir viviendo la vida de un individuo de 13 años, nada más. En su libro de experiencias, esto ya está grabado en oro. Blanco y oro   

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada